
Por Omar Alfaro
Estos tiempos de coronavirus han servido para hacer cambios en los ritmos de vida, en las costumbres, en las relaciones interpersonales y en muchos aspectos más.
Algo que enseña esta situación, es la oportunidad de disfrutar más lo que nos rodea. Verlo de una forma positiva y valorar. Definitivamente ya nada será como antes y las actividades al aire libre son de las mejores opciones para mantenerse saludables en lo físico y mental.
Afortunadamente Louisville ofrece cientos de lugares por visitar y que ayudarán para este propósito. Solo se necesita estar dispuestos a ello, siempre respetando las reglas que estos cambios vayan indicando.
¿Cuántos de ustedes disfrutaron esos días eternos en el bosque, en un río nadando, o la forma más simple de pasar el día de campo en familia o amigos y entre asadores y partiditos de fútbol?
Dentro de esas memorias, personalmente vienen a mi mente los días de infancia visitando un bosque al que llamamos La Alfombra. Así, inmenso, todo verde donde se respiraban los pinos y nos sentábamos a charlar junto al arroyo.
Una de las mejores sin duda, y si el lector me permite compartirla, otra ocasión cuando fuimos a un balneario que se llama Sierra Verde, todos felices entre familia y amigos. Al llegar al lugar, escoger la mejor vista, la mejor sombra, el mejor campo para jugar y la mejor comida…
¿Alguien dijo comida? Cuál va siendo la sorpresa que a nadie se le ocurrió la idea de sacar la carne del refrigerador. Todo terminó en llegar al pueblo próximo e invadir el restaurante del lugar.
Regresando a la realidad, en Louisville hay un lugar que a muchos nos puede traer recuerdos nostálgicos de nuestros países de origen o nuestra infancia o adolescencia.
El verde y pintoresco lugar está ubicado entre las calles Beargrass Road y Alta Vista Road, dentro del Parque Cherokee, es conocido como Big Rock (Gran Roca).

En especial este parque que es tan grande y nos regala tantas vistas y recorridos por todos lados, que alcanza para ir más de una vez. Y lo mejor, está en medio de la ciudad. Al ir caminando por los senderos, los gritos de los niños le van guiando a uno hasta encontrar esa roca enorme donde chicos y grandes realizan sus mejores saltos para caer al arroyo, nadar libremente e incluso divertirse al balancearse en columpios improvisados con cuerdas.
Considerere que el área es una buena opción para lograr el mejor día de campo y sobre todo, una opción para una caminata y buenas fotografías en familia. Incluso hay veredas para andar en bicicleta. No hay excusa, ¡un lugar ideal para despejar la mente! Sin salir de Louisville.
Así que en cuanto termine, o se haga más llevadera, esta desesperante etapa de la pandemia, no olvide que hay una opción más para ese anecdotario de vida. Vale la pena en su totalidad. Cabe mencionar la responsabilidad como visitantes, de mantener limpio el lugar y así poder disfrutarlo más.

Sólo un gran, gran favor… Si consideran el día de campo, ¡NO olvidar la comida! Miren que sé de lo que les escribo.
