Una oficial de la policía metropolitana de Louisville despedida en el mes febrero se declaró culpable de un delito menor de privación de derechos en un tribunal federal el martes por la tarde a cambio de evitar ir a la cárcel.
El cargo contra Katie Crews se deriva de su acción poco antes de que David “YaYa” McAtee fuera asesinado a tiros por miembros de la Guardia Nacional de Kentucky en su restaurante el 1 de junio de 2020.
La ex official Crews está acusada de disparar balas de pimienta a la sobrina de McAtee, Machelle McAtee, mientras estaba “en propiedad privada y no representaba una amenaza”, según los fiscales. Una investigación realizada por funcionarios de Kentucky descubrió que cuando Machelle huyó hacia el restaurante de barbacoa de su tío YaYa, David McAtee salió por la puerta principal y disparó su arma dos veces. Murió en el fuego de respuesta.
Sentada junto a su abogado Steve Schroering, Crews solo respondió: “Sí, señor”, a las preguntas del juez del Tribunal de Distrito de los Estados Unidos, Benjamin Beaton. Como parte del acuerdo de culpabilidad alcanzado con los fiscales, Crews accedió a renunciar a su certificación de cumplimiento de la ley en Kentucky.
En lo que Beaton llamó una “disposición no estándar”, Crews también deberá firmar una declaración jurada asumiendo la responsabilidad por el delito y jurando no postularse para ninguna carrera en aplicación de la ley en el futuro. Respondiendo a las preguntas de Beaton sobre cómo se haría cumplir, los fiscales dijeron que enviarían la declaración jurada al empleador si se enteran de que Crews está buscando trabajo en la policía.
A cambio, el Departamento de Justicia de EE. UU. permitió que Crews se declarara culpable de un delito menor y le pedirá a la corte que le conceda libertad condicional. Anteriormente ella enfrentaba hasta 10 años de prisión por un delito grave.
Ningún miembro de la familia McAtee asistió a la audiencia del martes, aunque los fiscales dijeron que informaron a la familia sobre el acuerdo propuesto.
Cuando Crews fue acusada en marzo, el abogado Steve Romines dijo que las acciones del oficial condujeron directamente a la muerte de David McAtee. Romines representa a la familia de McAtee en una demanda por homicidio culposo contra policías y miembros de la Guardia Nacional.
“Estos cargos evidencian el total desprecio de LMPD por sus propias políticas y la seguridad de los ciudadanos de Louisville”, dijo Romines en un comunicado. “Las negaciones de responsabilidad de la ciudad son solo una prueba de que, a pesar de los reclamos de responsabilidad y transparencia, nada ha cambiado”.
Los fiscales alegan que Crews usó fuerza excesiva contra Michelle McAtee. La policía llegó a la calle 26 y Broadway esa noche para disolver una fiesta que estaba violando el toque de queda en toda la ciudad establecido por el alcalde Greg Fischer en medio de protestas masivas en el centro. La fiesta fue pacífica y a varias cuadras de las protestas.
La investigación realizada por funcionarios estatales concluyó que fue un disparo de un miembro de la guardia lo que mató a David McAtee. El abogado de Commonwealth del condado de Jefferson, Tom Wine, se negó a presentar cargos contra Crews, el oficial de LMPD Austin Allen o los miembros de la guardia Andrew Kroszkewicz y Matthew Roark. Wine dijo el año pasado que cree que la policía actuó en defensa propia.
Crews y Allen no activaron sus cámaras corporales durante la redada, una violación que llevó a Louisville Fischer a despedir al entonces jefe de policía Steve Conrad.
En el momento en que Crews fue despedida de LMPD, estaba bajo investigación interna por violar la política de redes sociales del departamento.
Los equipos se burlaron de un manifestante en una publicación de Facebook de mayo de 2020 y escribieron: “Espero que las balas de pimienta le duelan. Vuelve y te llega más, vieja, estaré en la línea otra vez esta noche”.
Su sentencia está programada para el 30 de enero.
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